El bajo nivel de Raúl ha alimentado la polémica entre las dos Españas futbolísticas, debate que ya estaba en la calle incluso antes de su grave lesión. El rol del capitán es incuestionable para Luis y sus compañeros y el seleccionador cree en él y le ve encaje táctico en sus dos sistemas.El gran debate nacional acompaña a Raúl hace tiempo y amenaza con convertirse en arma arrojadiza, contra él y el propio seleccionador, si su rendimiento no es el adecuado en Alemania. Los dos lo saben y por eso su relación durante estos últimos meses (los de la lesión y el notable sacrificio que ha llevado a cabo el jugador) ha sido constante y fluida. Y me da que cuando Aragonés deja caer que hay gente con ganas, con sangre en el ojo, apunta entre otros y por elevación al capitán...
Los números de Raúl ya habían disminuido a ojos de la estadística y de sus detractores incluso antes de su lesión y por eso anda en lenguas. Luis ya le dejó en el banquillo en Belgrado y le sacó en el segundo tiempo ante Serbia, pero en esos 45 minutos y luego en los 90 del Calderón (marcó de cabeza) respondió en el campo.
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